El sector agrícola está cambiando. Si hasta hace poco los procesos de producción seguían siendo muy manuales y rudimentarios, la tecnología ha abierto nuevas puertas para una agricultura más eficiente y con una monitorización constante.

La introducción de la tecnología ha impulsado la Agricultura 4.0, un concepto que promete revolucionar este sector.

¿Qué es la Agricultura 4.0?

La Agricultura 4.0 se basa en un conjunto de tecnologías digitales integradas y conectadas a través de sistemas capaces de optimizar la producción agrícola en todas sus etapas. Este término deriva de la industria 4.0 y se remite a la digitalización de los procesos de producción y a la captación de datos (clima, suelo, entre otros) de dispositivos IoT.

A nivel general, podemos decir que la Agricultura 4.0 se centra en 4 aspectos principales:

• Gestión basada en datos
• Producción a partir de nuevas herramientas y técnicas
• Sostenibilidad
• Profesionalización
  
  

Ventajas de la Agricultura 4.0 para los agricultores

La introducción de la tecnología en la producción agrícola proporciona a los agricultores herramientas e información constante en tiempo real, lo que se refleja en ventajas tales como:

• Monitorización de producciones agrícolas - Utilizando sensores, drones, cámaras y dispositivos de geolocalización, los agricultores pueden comprobar el estado del cultivo en tiempo real, desde cualquier ubicación o dispositivo.

• Aumento de la productividad - Conociendo y siguiendo los diversos factores de producción, es posible prever plagas y otros problemas, lo que permite obtener mejores cosechas.
  
  

• Reducción de desechos – Mediante el uso de sistemas independientes y la georreferenciación se puede evitar la replantación de semillas para optimizar este proceso.
  
  

• Reducción de costes – Al aumentar la rentabilidad y la disminución de residuos, los agricultores consiguen reducir los costes asociados a la actividad.
  
  

¿Qué tecnologías ya están cambiando la agricultura?

Drones y vehículos automatizados

Con los drones es posible realizar vuelos no tripulados sobre las plantaciones para mapear la tierra y hacer fotografías de alta calidad que luego se utilizan para el análisis de enfermedades, sistemas de riego, monitorización y fumigación de cultivos.

Además de los drones, existen otros vehículos, a menudo autónomos, que pueden mejorar el tratamiento de los campos de cultivo. Estos vehículos, equipados con GPS, se pueden controlar y programar de forma remota para trabajar en áreas específicas del cultivo.

Sistemas de monitorización de la producción

Existen sistemas y plataformas capaces de recopilar datos y generar informes disponibles desde cualquier parte del mundo y en cualquier dispositivo. Gracias a estos sistemas, podemos conocer el estado actual, los costes asociados a la plantación y todos los indicadores clave en la gestión del trabajo agrícola.

Invernaderos inteligentes

Para que los cultivos sean más eficientes, se han desarrollado estructuras inteligentes que pueden medir en tiempo real todos los parámetros esenciales para el desarrollo del cultivo y aplicar automáticamente las correcciones necesarias, evitando así la supervisión constante.

Internet de las cosas (IoT)

Para acompañar el estado del cultivo, el suelo, el clima y otros muchos factores que afectan a los resultados, hay una gran variedad de sensores que se pueden incorporar para obtener datos importantes para los sistemas de análisis de cultivos.

La importancia del internet de las cosas en la Agricultura 4.0

El Internet de las cosas (IoT) tiene la capacidad de transformar el mundo en que vivimos, hacer que las industrias sean más eficientes y las ciudades más inteligentes. Sin embargo, su aplicación en la agricultura puede tener un impacto muy significativo.

Una de las aplicaciones más efectivas del IoT en la agricultura es la instalación de sensores en los campos de cultivo que transmiten información a dispositivos móviles. Estos sensores recopilan datos como la humedad y la temperatura del suelo, la radiación solar, la precipitación, etc. De esta manera, el agricultor recibe información detallada sobre los cultivos que puede ir desde pronósticos e informes de eventos de riego hasta pronósticos meteorológicos, evapotranspiración de cultivos, horas frío, etc.

Con los datos recopilados por los sensores, los agricultores pueden tomar decisiones más sustentadas y resolver rápidamente los problemas que puedan surgir en los cultivos.

La tecnología como solución para la agricultura en el futuro

El informe Agricultura 4.0 - El futuro de la tecnología agrícola de Oliver Wyman destaca 4 preocupaciones principales en este sector: demografía, escasez de recursos naturales, cambio climático y desperdicio de alimentos. Además, también se señala que hasta 2050 tendremos que producir un 70% más del volumen actual de alimentos.

En este sentido, el uso de la tecnología en la agricultura será un factor muy importante para el futuro y permitirá a los agricultores satisfacer las necesidades, siempre pensando en un lado más sostenible y equilibrado.

Complementariamente, la evolución tecnológica conduce a la modernización y automatización del trabajo administrativo, haciendo que el procesamiento de la información financiera (además de la ya mencionada información sobre la producción) sea más inteligente.

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